La primera en 2006 cuando decidió colgar las botas. La segunda en 2018 después de tres Champions seguidas. Y la tercera en 2021 tras su segunda etapa en el banquillo del Real Madrid. Zinedine Zidane lo ha vuelto a hacer y se marcha del club blanco con contrato en vigor y renunciando otra vez a cobrar su última temporada.
Quienes le conocen bien definen a Zidane como un tipo honesto, tímido hasta el paroxismo, fuerte de carácter a pesar de esa sonrisa seductora e imprevisible en sus decisiones. «Lo que piensa Zizou sólo lo sabe Zizou», dicen sus íntimos. El dinero nunca ha sido una de sus prioridades y se ha hartado de demostrarlo a lo largo de su carrera como futbolista… y como entrenador.
Su tercera salida del Real Madrid, cantada desde hace semanas, no hace sino ahondar en la leyenda del hombre que no se aferraba a los contratos porque en las tres ocasiones en las que ha decidido irse del club blanco lo ha hecho cuando tenía firmada una temporada más para quedarse.
Su primer adiós al Real Madrid fue al final de la temporada 2005-06 en aquel partido ante el Villarreal en el que el Bernabéu le despidió en pie. Zidane, siempre contenido, no pudo reprimir las lágrimas. Era su adiós al Real Madrid, pero también su adiós al fútbol, rubricado con el subcampeonato en el Mundial de Alemania con la expulsión en la final tras el cabezazo a Materazzi.
Comenzó luego su etapa como entrenador del Real Madrid, más propia de una película de Disney. Llegó en plena crisis para apagar el fuego provocado por Benítez y se convirtió en el mejor bombero del mundo. Sus tres Champions consecutivas serán un récord difícil, por no decir imposible, de superar. Pero ganó La Decimotercera y se marchó por sorpresa. Por supuesto, tenía firmado un año más como entrenador del Real Madrid.
Allegri, el candidato número uno para sustituir a Zidane https://t.co/ia5hX8YEuN
— okdiario.com (@okdiario) May 27, 2021
Meses meses después tuvo que regresar para coser el roto que su marcha había provocado. Ni Lopetegui ni Solari pudieron llenar ni una porción del hueco dejado por Zidane. Su segunda etapa en el banquillo del Real Madrid no ha sido tan exitosa como la primera, pero se marcha con otra Liga y una Supercopa en una planilla envejecida y con un equipo en obras.
Esta vez se vuelve a ir con contrato en vigor (tenía firmado hasta 2022) y se pierde la oportunidad de reinventar otra vez al Real Madrid con las expectativas de los Alaba, Mbappé o el nuevo Bernabéu. Pero a Zidane eso no le importa, igual que el dinero o los contratos. Zizou se mueve por su corazón y por su cabeza y ambos le han recomendado que era hora de irse del Real Madrid. Otra vez.